Creo haber hablado en alguna ocasión de lo mucho que me gusta poner caliente a los tíos por teléfono.
Me encanta agarrar el teléfono e ir explicando al perrete como se tiene que masturbar, cuando le tengo a puntito, llega mi orgasmo. Con gemidos a través del teléfono, para terminar diciendo “muy rico, querido. Adiós” y ahí se queda el perrete pidiendo más (supongo que se terminará su paja), suplicándome “espera no te vayas”.
Es algo tan maravilloso dejarle ahí con su paja a medias.
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Tienes que probarlo pero mientras te comen, eso es ya maravilloso 😀
Qué tengo que probar?
Hacer una de esas llamadas con alguien entre tus piernas… es lo mas
ahhhhh si si, eso lo he hecho. Pero sin poner caliente al que estaba al otro lado de la linea y aguantando mis gemidos…Molaría, voy a probar!
me acabo de dar cuenta de que tengo una llamada perdida, ¿Tiene algo que ver?
jajajaja, me temo que no.
entonces seguiré buscando las rodilleras…
Eres una Mujer impresionante, con una seguridad en ti misma que desborda. Rezumas sensualidad. Eres culta, con una prosa maravillosa. Lo directa que eres te hace única. Eres el Norte. Yo fui un estúpido por elegir a una abuelita a la que se le había pasado el arroz.
Sr. Ortiz. are you back?
Hummm 😉
Coincido con “ese”. Algo que hacer, situacion morbosa donde las haya.